La situación de los niños en Gaza es alarmante, según Jonathan Crickx, portavoz de Unicef en los Territorios Palestinos. Tras una misión en la zona, Crickx señaló que los menores enfrentan condiciones de extrema vulnerabilidad debido a la guerra entre Hamás e Israel, que ya lleva casi un año.
Crickx describió escenas inquietantes: niños fuera del sistema escolar obligados a buscar agua y comida en condiciones deplorables. Algunos cargan bidones sucios de 25 litros, mientras que otros buscan entre montones de basura para encontrar cartón y poder cocinar. "No tienen una vida normal, y eso es preocupante para su futuro", advirtió.
Además de la falta de acceso a servicios básicos como el agua, la situación escolar es catastrófica. Según Unicef, el 85% de los edificios escolares han sido destruidos, y ninguno de los niños ha asistido a clases en el último año. Crickx resaltó que alrededor de 19,000 niños han quedado sin compañía o separados de sus padres, lo que agrava su situación de vulnerabilidad.
La falta de esperanza es palpable, ya que los niños, privados de educación, se ven obligados a sobrevivir en medio de un entorno de violencia constante. "La educación da esperanza, y en este momento, los niños de Gaza no tienen esa esperanza", concluyó Crickx.
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