En las playas de la zona Diamante de Acapulco, salvavidas como Iván Gallardo Rumbo dedican horas de entrenamiento diario para garantizar la seguridad de los visitantes, a menudo sin recibir ni un agradecimiento. A sus 33 años, Gallardo, quien entrena de 7 a 11 de la mañana, ha participado en numerosos rescates durante esta temporada vacacional, asegurando que, pese a la falta de reconocimiento, la satisfacción de salvar vidas es su mayor recompensa.
Durante una demostración reciente en la playa Revolcadero, los salvavidas de la Promotora de Playas y Protección Civil estatal mostraron su habilidad y compromiso. A pesar de las condiciones adversas y el peligro constante, estos profesionales están siempre alerta, especialmente en playas con oleaje fuerte como El Morro y Emporio.
El Secretario de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil estatal, Roberto Arroyo Matus, mencionó que cada año se registran aproximadamente 26 muertes por ahogamiento en Guerrero, subrayando la importancia de seguir las recomendaciones de los salvavidas para prevenir tragedias.
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