El mundo del fútbol se ha teñido de luto luego de que dos aficionados de River Plate perdieran la vida en un trágico accidente de tránsito mientras regresaban a Buenos Aires tras presenciar la victoria de su equipo ante Talleres de Córdoba en la Copa Libertadores.
El accidente ocurrió durante la madrugada del 15 de agosto, alrededor de las 3:30 horas, en el kilómetro 357 de la carretera entre Rosario y Córdoba. Los hinchas viajaban en un Peugeot 308 que se estrelló contra la parte trasera de un camión que aparentemente estaba estacionado en el acotamiento. En el impacto, fallecieron el conductor de 57 años y un acompañante de 68, mientras que un tercer pasajero, un joven de 19 años que sería hijo de uno de los fallecidos, fue trasladado al hospital en estado grave. El conductor del camión también resultó herido y fue llevado a un hospital.
Las primeras investigaciones señalan que no había huellas de frenado en la escena, lo que ha generado dudas sobre las circunstancias exactas del accidente.
Los aficionados habían asistido al Estadio Mario Kempes en Córdoba para ver a River Plate conseguir una valiosa victoria en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. El trágico desenlace de su viaje ha dejado consternada a la comunidad futbolística, que lamenta profundamente la pérdida de estos seguidores que fallecieron tras apoyar a su equipo.
Este suceso subraya la importancia de la seguridad en los desplazamientos de los aficionados y abre un debate sobre las condiciones en las que muchos hinchas viajan largas distancias para seguir a sus equipos.
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