En un operativo de verificación migratoria realizado en Silao, Guanajuato, migrantes acusaron a la Guardia Nacional de disparar durante la intervención, afirmando que una niña resultó herida y posteriormente falleció. Los hechos ocurrieron la noche del 12 de agosto cerca del Puerto Interior, donde un nutrido grupo de migrantes, en su mayoría provenientes de Venezuela, Colombia, Ecuador, Cuba y Perú, fue abordado por las autoridades.
Aunque la Guardia Nacional y el Instituto Nacional de Migración (INM) negaron cualquier tipo de agresión o disparos, la Secretaría del Migrante del estado aseguró que acudió en auxilio de las personas migrantes, indicando que fueron agredidas por las autoridades federales.
Videos grabados por vecinos de la comunidad San Francisco de Asís, cercana al Puerto Interior, registraron detonaciones y gritos pidiendo ayuda, lo que incrementó la tensión en el lugar.
El reporte inicial de la Policía Municipal de Silao señalaba disparos en la zona y una menor lesionada, versión que fue rechazada por la Guardia Nacional, la cual afirmó que no hubo heridos en el lugar. A pesar de las negaciones oficiales, migrantes que lograron escapar del operativo aseguraron que sí hubo disparos y que una niña murió a causa de ellos. Además, destacaron el apoyo recibido por habitantes de la comunidad, quienes les ayudaron a huir del operativo.
El Instituto Nacional de Migración emitió un comunicado posterior en el que calificó la intervención como un operativo de "rescate humanitario", negando cualquier incidente violento y asegurando que se trató de un procedimiento disuasivo para rescatar a 60 migrantes que transitaban en condiciones irregulares. Sin embargo, la Secretaría del Migrante estatal se comprometió a apoyar a los afectados y a colaborar en cualquier investigación que se lleve a cabo para esclarecer los hechos.
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