Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, expresó su optimismo sobre la sólida relación entre ambos países, a pesar de las recientes tensiones causadas por las reformas al Poder Judicial y la desaparición de reguladores autónomos en México. En una rueda de prensa al concluir la Tercera Convención Nacional: Un Nuevo Futuro Compartido, realizada en Ciudad de México, Salazar aseguró que, a pesar de las críticas que ha emitido sobre estas reformas, la relación económica entre México y Estados Unidos permanecerá robusta.
El embajador había señalado anteriormente que las reformas y la desaparición de ciertos reguladores preocupaban a los inversionistas estadounidenses y podrían tener repercusiones para México y el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Sin embargo, Salazar subrayó que México sigue siendo el socio más importante de Estados Unidos en el hemisferio y que esta relación no cambiará.
Salazar también elogió al presidente Andrés Manuel López Obrador, calificándolo de “campeón importante” para la integración en Norteamérica y el T-MEC. Además, mostró confianza en la llegada de Claudia Sheinbaum, la primera mujer presidenta en la historia de México y Norteamérica, destacando su conocimiento tanto de México como de Estados Unidos y su papel en el escenario global.
En cuanto a la colaboración en la lucha contra el narcotráfico, Salazar destacó los esfuerzos conjuntos en el desmantelamiento de cárteles de la droga y la reducción del tráfico de armas.
Celebró las recientes capturas de narcotraficantes, incluyendo a los hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán y otros líderes del Cártel de Sinaloa, y reconoció el sacrificio de vidas humanas en estas operaciones. Sin embargo, también lamentó el impacto devastador del fentanilo, que ha causado al menos 6 mil muertes en Estados Unidos, y el papel de las armas estadounidenses en el crimen organizado en México.
Salazar también abordó el tema migratorio, señalando que la relación bilateral ha evolucionado para enfrentar el flujo histórico de migrantes hacia Norteamérica. Destacó la necesidad de modernizar la frontera en lugar de construir un muro, en un contexto en el que la elección presidencial en Estados Unidos podría influir en las decisiones futuras sobre este tema.
Finalmente, el embajador enfatizó la importancia de una frontera moderna que proteja el medio ambiente y atienda las áreas más desatendidas, en contraste con la visión de algunos que prefieren levantar un muro físico entre los dos países.
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