El movimiento chií libanés Hezbolá ha confirmado este sábado la muerte de su líder, Sayed Hasán Nasrala, quien habría sido asesinado en un ataque aéreo israelí el viernes en el sur de Beirut. Nasrala, quien dirigió el grupo desde 1992, se unió a la lista de mártires del movimiento tras un intenso bombardeo en su presunto cuartel general, ubicado en los suburbios conocidos como el Dahye.
Contexto del Ataque
Según la información proporcionada por las autoridades israelíes, el ataque aéreo estuvo dirigido específicamente a acabar con la vida de Nasrala, lo que provocó la destrucción de varios inmuebles residenciales en la zona y dejó al menos seis muertos y decenas de heridos. Sin embargo, el comunicado de Hezbolá se limitó a anunciar la muerte de su líder sin entrar en detalles sobre el ataque ni sus consecuencias.
En su mensaje de condolencias, el grupo chií reafirmó su compromiso de continuar la lucha contra Israel en apoyo a Gaza y en defensa del pueblo libanés. “Su eminencia Sayyed Hasán Nasrala se unió a sus grandes e inmortales mártires, cuyo viaje dirigió durante casi treinta años conduciéndoles de victoria en victoria”, señaló el comunicado.
Biografía de Sayed Hasán Nasrala
Sayed Hasán Nasrala asumió el liderazgo de Hezbolá en 1992 tras la muerte de su predecesor, Abbás al Musawi, quien también fue víctima de un ataque israelí. Desde entonces, Nasrala ha sido una figura clave en el movimiento, liderando a sus tropas durante eventos significativos, incluyendo el final de la invasión israelí al sur del Líbano en el año 2000 y la guerra de 2006 contra Israel. Más recientemente, su liderazgo se centró en el apoyo a Palestina y Gaza, especialmente desde el inicio del conflicto en octubre pasado.
Reacciones y Continuidad del Movimiento
Hezbolá ha prometido continuar con su lucha en honor a Nasrala, a quien consideran un mártir. En su comunicado, el grupo enfatizó que “la dirección de Hezbolá promete al mártir más alto, más santo y más preciado de nuestra trayectoria que continuará con sus esfuerzos para enfrentar al enemigo en apoyo a Gaza y a Palestina”.
Tras el anuncio de su muerte, la cadena de televisión Al-Manar, asociada a Hezbolá, comenzó a emitir versículos del Corán como parte del ritual de duelo, reflejando el impacto que la figura de Nasrala tuvo en la comunidad chií y en la narrativa del movimiento.
La muerte de Sayed Hasán Nasrala representa un momento crítico para Hezbolá y para la región, especialmente en un contexto de tensiones crecientes en Medio Oriente. A medida que el movimiento chií busca continuar su misión bajo un nuevo liderazgo, el legado de Nasrala, así como su influencia en el activismo palestino, dejará una huella significativa en los eventos futuros.
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