La purga en la cúpula militar rusa continúa con la reciente detención del general Pavel Popov, ex viceministro de Defensa de Rusia durante trece años, hasta su destitución en junio pasado. Popov es el último de una serie de altos funcionarios militares arrestados bajo la nueva dirección del Ministerio de Defensa, encabezada por Andrei Belousov, economista que asumió el cargo en mayo de este año con la misión encomendada por el presidente Vladimir Putin de erradicar la corrupción dentro de las filas más altas del ejército.
Con esta última detención, ya son trece los funcionarios de primer nivel, incluidos tres viceministros, que han sido encarcelados en espera de juicio por cargos que van desde soborno y estafa hasta malversación y prevaricación. Entre los detenidos se encuentran antiguos colaboradores cercanos del exministro Serguei Shoigu, quien ha sido reubicado como secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, pero cuyas conexiones con los acusados siguen siendo objeto de escrutinio.
Las acusaciones contra Popov incluyen el desvío de recursos destinados a proyectos como el parque militar Patriot y un templo de la Iglesia Ortodoxa Rusa, además del uso de estos fondos para financiar lujos personales, como la adquisición de mobiliario exclusivo para su mansión en las afueras de Moscú. A pesar de ser la detención más reciente, se espera que continúen los arrestos en el marco de esta campaña anticorrupción, que ha visto a otros altos mandos militares caer por presuntas actividades ilícitas en el manejo de fondos destinados a la "operación militar especial" en Ucrania.
La purga, que ha resultado en la muerte de tres investigados antes de ser llevados a juicio, subraya la profundidad de la corrupción que ha plagado al Ministerio de Defensa ruso, agravada por los ingentes recursos movilizados para la campaña militar en Ucrania. Con la detención de Popov, la presión sobre el círculo cercano de Shoigu se intensifica, marcando un momento crítico en la reestructuración del liderazgo militar ruso bajo la supervisión de Putin.
Commentaires