Más de 700,000 personas han sido desplazadas de sus hogares en Haití debido al incremento de la violencia, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Esta cifra representa un aumento del 22% en solo tres meses, lo que evidencia el deterioro de la situación humanitaria en el país. La violencia de bandas y grupos armados ha provocado el desplazamiento de más de 110,000 personas en los últimos siete meses, especialmente en la región de Gressier, cerca de Puerto Príncipe.
Grégoire Goodstein, jefe de la OIM en Haití, hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para brindar apoyo al pueblo haitiano y las comunidades de acogida, quienes han mostrado una gran resiliencia ante los crecientes desafíos. La OIM estima que el 75% de los desplazados han sido acogidos en zonas rurales, siendo la provincia de Grand Sud el refugio más grande, albergando a un 45% de los desplazados.
La capital, Puerto Príncipe, acoge a un cuarto de los desplazados, muchos de los cuales viven en condiciones precarias, con poco acceso a servicios básicos. La falta de recursos y la creciente inseguridad alimentaria afectan tanto a las familias desplazadas como a las comunidades que las acogen.
La OIM reafirmó su compromiso de colaborar con el Gobierno de Haití y socios internacionales para proporcionar asistencia vital y encontrar soluciones a largo plazo. La organización instó a continuar los esfuerzos para restablecer la estabilidad y seguridad en el país.
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