El 11 de septiembre de 2024, Chile recordó el 51 aniversario del golpe de Estado que derrocó al gobierno socialista de Salvador Allende en 1973. Allende murió en el Palacio de La Moneda ese día, cumpliendo su promesa de no rendirse ante los golpistas, quienes instaurarían una dictadura liderada por Augusto Pinochet. Durante los 17 años de régimen, más de 40,000 personas fueron víctimas de asesinatos, desapariciones y torturas, dejando profundas cicatrices en el país.
A pesar de los años transcurridos, las heridas del golpe siguen abiertas. Miles de personas se reunieron en sitios históricos, cementerios y centros de memoria para rendir homenaje a las víctimas y recordar los eventos que marcaron la historia de Chile. Las imágenes de los militares atacando La Moneda, el palacio en llamas y el cuerpo de Allende son recordatorios imborrables de aquel día fatídico.
El presidente Gabriel Boric, en una ceremonia en La Moneda, honró la memoria de Allende y destacó que ningún conflicto político justifica la violencia y el exterminio de compatriotas por sus ideas. A pesar de algunos intentos por minimizar o justificar el golpe, Boric subrayó que las violaciones a los derechos humanos son indivisibles del golpe de Estado y deben ser recordadas con dignidad y justicia.
La jornada conmemorativa estuvo marcada por el recogimiento, pero también por la tensión, ya que, como ocurre todos los años, se previeron protestas nocturnas en diversas partes del país.
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