En medio de la polémica por la reforma judicial, las senadoras del PRI y PAN han lanzado serias acusaciones contra las morenistas Ernestina Godoy y Citlalli Hernández por convocar a una sesión de forma irregular. El conflicto surge justo cuando se intenta avanzar en la discusión de esta reforma crucial para el sistema judicial mexicano.
Durante una reunión de las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos, la senadora priista Claudia Anaya denunció que la convocatoria para la sesión, programada para el próximo domingo, se realizó solo con las firmas de las presidentas de ambas comisiones, sin el consenso requerido de la Junta Directiva. Anaya destacó que el reglamento del Senado exige un acuerdo tanto de las presidentas como de la Junta Directiva para convocar a sesiones conjuntas, algo que, según ella, no ocurrió en este caso. Además, señaló que la convocatoria no contaba con las firmas de los secretarios de las comisiones, lo cual refuerza su argumento sobre la irregularidad del proceso.
La senadora panista Mayuli Martínez también expresó su descontento, cuestionando la premura con la que se convocó a la sesión y criticando la rapidez con la que se instalaron las comisiones. Martínez insinuó que esta prisa podría estar relacionada con un intento de acelerar el proceso de aprobación de la reforma judicial de manera irregular.
Por su parte, Citlalli Hernández, presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, defendió la convocatoria, asegurando que se realizó en el marco del reglamento del Senado. Hernández subrayó que las convocatorias extraordinarias están contempladas dentro del procedimiento parlamentario.
La senadora del PT, Geovanna Bañuelos, también intervino para desmentir las acusaciones de un “fast track” para la reforma judicial. Bañuelos argumentó que el avance en la reforma está alineado con la agenda del movimiento y que no se está buscando acelerar el proceso de manera inapropiada.
En respuesta a las críticas, el líder del PAN, Marko Cortés, advirtió que su bancada participará en la discusión, pero lo hará bajo protesta debido a la existencia de al menos dos suspensiones judiciales relacionadas con el tema. Cortés indicó que la bancada panista espera que se respeten los procedimientos legales durante el debate.
El próximo domingo 8 de septiembre a la 1:00 p.m., las comisiones se reunirán para iniciar la discusión de la reforma judicial, un proceso que promete ser intenso y polémico, reflejando las tensiones políticas actuales en el Senado.
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